
Lugares para visitar en Isabela – Galápagos: El Muro de las Lágrimas
Como en todas las historias, no todo puede ser felicidad; Galapagos también tiene un lado oscuro y la isla Isabela fue la protagonista. Todo comenzo en 1946, cuando el presidente de Ecuador José María Velasco Ibarra, declara a la isla una colonia penal, para encarcelar, según cuentan, a los presos más peligrosos del país.
Isabela era una isla que para ese momento no tenía tantos habitantes y a su vez se quería aprovechar las instalaciones que habián dejado los norteamericanos después de la Segunda Guerra Mundial, por tal motivos se instala la carcel en la isla.
Durante el tiempo en funcionamiento se le obligaba a los prisioneros, a modo de castigo, a construir un muro en donde cada piedra era traida por ellos e instalada en el muro. Durante su construcción murieron varios prisioneros como consecuencias de caídas, así como también por la falta de comida que reinaba la zona.
La construcción de la pared, según cuenta, también servía a manera de distracción debido a la soledad y el aislamiento que afectaba tanto a los reos como a los mismos policias.
Cada piedra fue colocada por los reos entre los años de 1946 a 1959 que fue el tiempo que estuvo en funcionamiento la carcel.
Una de las tantas historias que cuentan los locales es que durante el funcionamiento de la carcel hubo una fuga de prisioneros, pero lo curioso fue la forma en que se dieron las cosas. Una noche los reos se revelaron y engañaron a los policias con una obra teatral llamada “La fuga de los prisioneros”; durante la obra emborracharon a los policias con licor artesanal. En una de las escenas tenían que atar a los policias y estos, al estar borrachos, dejaron que lo hicieran y fueron despojados de sus armas. Para este momento gran parte de los reos se habían fugados mientras que otros vandalizaron las instalaciones. A consecuencia de esto hubo pánico en el pueblo de Puerto Villamil en donde la gran mayoría se refugio en la iglesia.
A raíz de los sucedido y por varios actos similares, en 1959 se decide el cierre de la carcel. La gran mayoría de los prisioneros fueron indultados y varios se quedaron viviendo y haciendo su vida en la isla, así como también parte de los policias custodios.
El paredon quedo intacto y mucho tiempo después y quizás para que fuera una atracción turística fue llamado el Muro de las Lágrimas, en mi opinión es simplemente un recuerdo de una etapa triste vivida. Puede ser visitado por cuenta propia y se puede observar cada una de las piedras volcánicas utilizadas, mide 100 metros de largo, 7 de alto y 3 de ancho.
Según los locales en las noches se pasean fantasmas ahogados en llantos y gritos, recordando las personas muertas durante la epoca de su construcción.
Cómo llegar
El Muro de las Lagrimas es uno de los pocos sitios en Isabela que puede ser visitados por cuenta propia, así como también el Centro de Crianza de las Tortugas, queda al final de un sendero de 6 kilómetros, dentro de un complejo de humedales. Durante el recorrido existen varios puntos turísticos, entre miradores y playas, pero los protagonistas son las tortugas, que se pasean libremente por el camino.
Nota: los autos solamente pueden llegar hasta donde se encuentra el punto 1.
El recorrido lo puedes hacer a pie, pero considera que son 6 km por lo que hace mas o menos 4 horas ida y vuelta, también lo puedes hacer en bicicleta, que se hace mucho más corto. En auto solamente puedes llegar hasta cierto punto y después de allí tienes que caminar 4 kilómetros más, anteriormente se dejaba el paso de carros pero en ocasiones no se respetaba el límite de velocidad ocasionando accidentes en especial con las tortugas, por lo que de un tiempo para acá se ha restringio el paso.
Una vez que llegues al muro te encontrarás con unas escalinatas, si quieres puedes subirla pero te advierto que en ocasiones no verás su final, son bastante, pero al llegar a lo más alto tendrás una gran recompensa, disfrutar de una hermosa vista panorámica del lugar.
Como dato histórico del lugar, estas escalinatas también formaron parte de la carcel, desde acá los policias hacian las rondas respectivas ya que desde acá se tiene una muy buena visión de lo que ocurre abajo.
Recomendaciones para la visita
Te recomiendo que alquiles una bicicleta y hagas el recorrido en ella, yo cometí el error de irme caminando (me encanta caminar) y casi me iba muriendo del calor, sobretodo cuando me toco subir las escalinatas.
Llevate zapatos deportivos ya que una vez que llegues al Muro de las Lágrimas vas a encontrar bastantes rocas volcanicas sobretodo al momento de subir las escaleras, si te vas en sandalias o algo parecido te vas a lastimar.
Haz la visita bien temprano en la mañana o en la tarde, tipo 4 de la tarde, para que así no te afecte tanto el calor.
Llevate agua, durante el recorrido no encontrarás ningún sitio en donde puedas comprar algo.
En el sendero abre bien los ojos para que puedas ver a las tortugas, muchas veces se ocultan entre los humedales.
De regreso puedes bañarte en alguna de las playas que quedan por el sendero, la recomendada por los locales es la Playa del Amor.
Si tienes alguna duda no dudes en dejarmela en los comentarios.
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