Perú, Viajando a:

Viajando a conocer Puno y el Lago Titicaca

Cuando viaje a Perú sabía perfectamente que tenía que conocer Cusco y el Machu Picchu pero me quedaban unos días para conocer algo mas de ese país, por esa razón hice una investigación exhaustiva de que otro lugar podía visitar y después de buscar por internet por bastante tiempo me convencí en ir a Puno y conocer el Lago Titicaca, la razón fue una foto que vi de las Islas Flotantes de los Uros y quería conocer más sobre su historia.

Llegue a Puno por tierra desde Cusco, lo hice en los buses turísticos que salen desde acá y durante el recorrido realizan paradas para conocer sitios de interés que están en la vía, era la primera vez que tomaba este estilo de transporte pero me pareció una buena opción porque primero durante el recorrido disfrutas del paisaje, en este caso me iba adentrando más y más en los andes, y segundo conoces zonas que te habría sido difícil conocer de otra forma, por ejemplo conocí Pukará y la historia de los famosos toritos de Pukará que les contare en otras entrada.

El viaje fue agotar, fueron casi 12 horas, por supuesto con las respectivas paradas para visitar y comer, al llegar a Puno lo primero que note fue el frío que hacía, para serles sincera acá cometí mi primera novatada y fue que cuando planifique el viaje nunca revise el clima de Puno y fue estando en Cuzco que me percate que podía llegar a 0 grados, por eso me toco comprarme un sweater de alpaca para ver si me cubría y por supuesto aplicar la teoría de las capas, ponerte tantas capas encima hasta que te sientas calientita, razón por la cual en todas las fotos si con mucha ropa encima.

Esa noche no salí del hotel, primero estaba muy cansada y segundo no estaba preparada para el frío, me termine de comer algo que había llevado durante el viaje y listo, me fui a acostar. En la mañana me tocaba levantarme bien temprano para ir a conocer el lago de Titicaca. Cuando me despierto tuve la sorpresa que estaba lloviendo, y no era una lluviecita mañanera sino era una lluvia que parecía que iba a hacer todo el día, mi preocupación era que iba a hacer bastante frío y que a su vez no iba poder conocer el bien el lago. A las 7 en punto me pasaran buscando la agencia que había contratado con anterioridad y nos fuimos hasta el muelle, les pregunte que si podíamos salir así y me dijeron que seguramente se iba a retrasar todo, cosa que fue así fue hasta las 8:30 que pudimos salir también porque el lago estaba muy picado y no era recomendable, los primeros 10 minutos fueron fuertes pero después se fue la lluvia y salió un sol radiante que nos acompaño durante todo el viaje.

Viajando a conocer Puno y el Lago Titicaca

Durante el recorrido en la lancha conocí a dos señoras argentinas que se conocían desde la infancia y por años habían planeado este viaje hasta que lo pudieron hacer, también conocí a un muchacho peruano que trabajaba en las minas que quedan cerca de Puno y era la primera vez que hace este paseo, ellos fueron mis compañeros durante todo el día.

Las vistas del lago son impresionantes, sinceramente me encanto aunque no puede estar mucho tiempo afuera de lancha por el frio que hacía, después de un recorrido de una hora aproximadamente empezamos a ver las famosas Islas de los Uros, pequeñas islas hechas con totora, aunque no les quiero hablar en esta entrada sobre esto, esta comunidad merece un post aparte, por esa razón voy saltar esta visita para irme directamente a la Isla Taquile en el Lago Titicaca.

Para los que no conozcan esta geografía el Lago Titicaca comparte dos países, Perú y Bolivia, y dentro de él hay varias islas, la más famosa del lado peruano es la Isla Taquile ya que es la más grande de este lado aunque no es la más gran del lago ya que esa si la tiene el lado de Bolivia y se llama la Isla del Sol.

Al llegar a uno de los muelles de la isla tienes que subir un sin fin de escaleras que no ves la hora de terminar de subir y esto se debe a la altura, que para mi caso me afecto bastante. Una vez que estas arriba tienes una panorámica impresionante y sinceramente una de las más espectaculares que he visto en mi vida, inclusive hasta el día de hoy puedo ver una foto de este lugar y de una vez lo reconozco, no se que tiene de particular pero lo hace inconfundible.

Los habitantes de la isla, los taquileños, conservan las tradiciones y yo diría que todo lo de sus antepasados incas, y eso lo vas a notar en su vestimenta, en su idioma pero en especial en sus costumbres, es impresionante ver un lugar en donde prácticamente la tecnología es escasa y que aun se conserve tradiciones que son de hace miles de años. Muchos de ellos no hablan el español sino el quechua por eso que conversar con ellos es muy difícil aunque siempre predominara el lenguaje de las señas y sobretodo el de la sonrisa porque ellos siempre están sonriente.

En su plaza principal encontrarás lugares para comprar ropa o algún detalle con los magníficos textiles que se hace allí mismo en la isla. De verdad que es una experiencia maravillosa conocer esta cultura y que espero se mantenga así por mucho tiempo porque es lo que los hace auténticos.

Viajando a conocer Puno y el Lago Titicaca
Después de esta visita y por supuesto del respectivo almuerzo era la hora del regreso, obviamente fueron dos horas de viaje en lancha en donde todos pudimos practicar lo mejor que hacemos, dormir. A la llegada nuevamente al puerto nos dejaron a cada quien en los respectivos hoteles y esta vez sino me quede encerrada en hotel, esta vez me fui a recorrer Puno con mis nuevas amigas argentinas.

La plaza de la ciudad es muy bonita y en las noches hacen espectáculos tradicionales cosa que lo hace un atractivo para visitar, caminar por sus callecitas también vale la pena, lo que si me impresiono es la cantidad de turistas, no se si es porque queda cerca de la frontera con Bolivia o que es más pequeño, pero mi impresión fue que acá encontré más turista que en la misma Cuzco.

Y después de un buen recorrido por la ciudad y una buena cena me fui para el hotel a descansar ya que al día siguiente tocaba un día nuevamente a levantarse temprano para visitar las Chulpas de Sillustani, pero ese será otra entrada.

Deja un comentario